16 de septiembre de 2014

La dicha del destino




De mi boca puedo darte palabras, 

puedo darte ilusión, incluso sueños... 
De mi boca quiero darte un beso, 
uno eterno, que te haga sentir, 
lo que no se siente con las palabras. 
De mi boca, quiero darte algo dulce,
tan dulce como el néctar de los dioses, 
algo que sea adictivo, 
pero que también se pueda controlar. 
Que unos simples labios te hagan recordar, 
recordar momentos que solo alguien como yo te pueda dar. 





De mis ojos puedo darte miradas, 
miradas que digan mucho o que no digan nada... 
De mis ojos quiero darte una visión de mi mundo, 
de mi entorno, de lo que soy. 
Quiero darte mis miradas mas sinceras y mas reales, 
quizás a veces mis ojos lloren, de tristeza, de alegría. 
Quizás no sepas entender lo que quiero mostrarte con eso. 
Pero de mis ojos, 
quiero darte el reflejo de mi alma y 
solo si tu quieres podrás lograr encontrarla. 








De mis manos quiero darte mis caricias, 
cálidas, frías, temblorosas... 
De mis manos quiero darte sensaciones... 
Quiero que sientas mi fuerza y 
mi presencia cuando la necesites y cuando no. 





Porque todo lo que quiero es que sientas mis sentimientos. Porque quizás tú merezcas eso. Pero recuerda que esto solo son palabras.. Palabras que cualquiera puede escribir pero que muy pocos pueden sentir. 



Todo lo que ves es lo que soy...



[Presente abierto, pasado cerrado].

No hay comentarios:

Publicar un comentario